Este mes celebramos el 126avo aniversario del nacimiento del Gurú Paramahansa Yogananda, quien dejó un legado de enseñanzas alcanzables a todos nosotros en sus libros como “Autobiografía de un Yogi”. Por lo que dedicaré esta columna a compartir esas ricas y profundas enseñanzas. El día de hoy con el tema “Gozo” con esta cita:
“Cada día, desde el amanecer, irradiaré dicha a todas las personas que encuentre. Seré como un sol mental para quienes se crucen en mi camino. Encenderé cirios de sonrisas en el corazón de los que carecen de alegría. Y ante la inextinguible luz de mi dicha, se desvanecerá la oscuridad. Permite que mi amor difunda su risa en todos los corazones, en las personas de todas las razas. Deja que mi amor descanse en el corazón de las flores y de los animales y en las diminutas partículas del polvo estelar. Procuraré ser feliz en toda circunstancia y tomaré la determinación de ser interiormente feliz, desde este mismo instante y en el preciso lugar donde me encuentro hoy.” ~Paramahansa Yogananda.
En sus enseñanzas Yogananda nos invita a llevar la práctica del yoga a nuestra vida diaria, a vivirlo más allá de la hora clase y del tapete de posturas. El gozo es una alegría profunda, más allá de la excitación o la pasión. Es encontrar en nuestro interior una alegría que surge de la paz y de lo profundo del ser humano, una conexión con la divinidad.
Así que la práctica de yoga de esta semana es encontrar ese gozo y desde la mañana vivirlo y compartirlo con los que nos rodean. La invitación es practicar la meditación todos los días y desde el silencio y con la intención de encender nuestra lámpara de la alegría compartirla con los demás. Compartir ese gozo con los que crucen tu camino y que tal vez carezcan de alegría en sus vidas.
No es arreglar la vida los demás, es compartir un momento con una sonrisa sincera, con un oído atento, sin juicios, con compasión. Comparte tu alegría profunda a donde vayas y que esa dicha se multiplique. Así te convertirás en una lampara del gozo interior, sin solucionar nada que no sea tuyo a menos que el consejo sea solicitado.
Recuerda recargar tu batería y ser feliz, en toda circunstancia. La forma de recargarte es mediante la meditación, mediante el contacto con la dicha y el gozo divino que solo puedes experimentar en el silencio de tu cuerpo y mente, escuchando con el corazón y llenándolo de ese amor atemporal e imperecedero de la divinidad.
Esta es la invitación de Paramahansa Yogananda, experimentar el gozo y compartirlo con todos lo que están cerca, sean familia, sean conocidos, sean mascotas, sean plantas, todo ser que esté cerca de ti merece ser integrado en tu gozo para que se multiplique.
Yoga y Ayurveda 