¿Has tenido recientemente problemas de malestar estomacal, indigestión o inflamación? Muchas veces optamos por la solución más fácil que es un medicamento. El día te hoy te invito que tu principal guía seas tú mismo. Para ello es necesario tener un proceso de autoobservación desde tu constitución física, tu forma de ver el mundo, emociones y pensamientos muestran tus necesidades individuales. A mí me encanta ayudar a las personas en este proceso de autobservación y guía en el proceso de autodescubrimiento. Ayudar a descubrir tu individualidad es la autorreferencia para lograr la salud y por ello es necesario que tus hábitos alimenticios estén en función de estas necesidades particulares.
Es necesario poner atención a las claves internas de bienestar o malestar que se producen a partir del consumo de determinados alimentos, situaciones o emociones. La alimentación es una de las claves para mantener la salud en el organismo, es importante reflexionar en el acto de comer, verlo como un acto sagrado y no como un acto mecánico. Existen muchas razones que perturbar nuestra capacidad de digerir los alimentos, una de ellas son los alimentos en sí mismos, pero existen otras igual de importantes. Hoy quiero dejarte una tarea que comúnmente dejo a mis clientes para que practiques en esta semana y veas los cambios en tu cuerpo.
La tarea es “come sólo cuando tengas hambre” pareciera una cosa lógica, pero muchas veces no lo hacemos así, comemos mientras manejamos o estamos en camino a algún otro lugar o a la carrera. La invitación es vencer esta forma de comer. Es una invitación a comer consciente, a conectar con las necesidades reales de tu cuerpo y no comer por emociones que nos angustian o generan ansiedad.
Para lograr comer sólo cuando tengas hambres deberás permitir que la inteligencia de tu cuerpo esté presente para enviar el mensaje a tu cerebro y que estés alerta cuando sea realmente necesario el comer. Esta es el hambre fisiológica, no mental no emocional. El objetivo es ver a qué hora tu cuerpo tiene hambre. Tu logro será que en poco tiempo tendrás horarios establecidos de acuerdo con las necesidades reales de tu cuerpo.
En este comer consciente tendrás la tarea de comer hasta estar satisfecho, no lleno, esto implica comer con tranquilidad y calma para percibir el mensaje del estómago. El objetivo es que antes de estar al cien por ciento de la capacidad estomacal, podemos detener la ingesta de alimentos y quedar con el estómago está al ochenta por ciento de su capacidad. Esto permitirá que se lleve a cabo una digestión adecuada.
Para lograr la buena digestión considera tus horas de comer como sagradas, no como un acto mecánico. Rompe la costumbre de comer hasta llenar, come sólo cuando tu estómago esté listo para digerir. La invitación para toda esta semana es “Comer solamente cuando tengas hambre” lo cual te ayuda a comer consciente.
Buen provecho.