La verdadera libertad consiste en estar “sin angustiarse por la imperfección” es lo que enseñaba el maestro zen, Seng Tsan. En nuestro día a día deseamos hacer cosas, lograr metas, visitar nuevos lugares, desarrollar nuestra mejor versión de nosotros mismos. Siempre dando cabida a una necesidad de hacer para ser mejor, con un mensaje subyacente de imperfección o de falta de valía en el “yo actual”.

Esta falta de valía que nos creemos de forma inconsciente genera en nuestro interior un anhelo que es prácticamente imposible de saciar, la necesidad de ser especial. Atrás de esta necesidad de ser especial se ocultan pensamientos de “no ser lo bastante bueno”, “de ser defectuoso”, “de no merecer el ser feliz”. Estos pensamientos nos crean una prisión.
Hoy te invito a que tomes consciencia de esta prisión y que vivas de forma libre, sin preocupación por la imperfección. Vive como Tara Brach lo recomienda en una “aceptación radical” que es “reconocer con claridad lo que pasa dentro de nosotros, observando lo que vemos con un corazón abierto, amable y amoroso.”
La aceptación sólo puede venir de tu interior, más allá de la necesidad de validación externa, la cual puede existir o no, la aceptación no te la puede otorgar nadie más que tu mismo. Para ello es necesario un trabajo de autoindagación de tipo meditativo, esta práctica meditativa te ayudará a soltar los juicios, que son irrelevantes y estorban en este camino, para observar tu yo interior y lo que te aprisiona o no te deja vivir con libertad.
Para poder observar estas limitantes tienes que hacerlo con un corazón abierto, amable y amoroso. Para ello la técnica de mindfulness o atención plena nos ayudará y si es acompañada de compasión nos permitirá ver en nuestro interior con ternura y solidaridad.
Aceptación no es resignación, es ver las cosas un lente claro, sin ilusiones, ni culpas. Por ello al permitirte aceptar tu situación desde la compasión, el amor y la claridad te permite sanar y avanzar en tu vida, libre de hábitos inconscientes de la falta de valía o culpa. El día de hoy te invito a que profundices en tu interior y te des permiso para sanar desde una aceptación.
