Estamos viviendo en San Luis Potosí los cambios de clima, ya se acerca la primavera. Este momento de transición en la tradición ayurveda, y de limpieza del yoga, es un momento para detoxificar el cuerpo de las toxinas que en ayurveda llamamos “ama”.
La transición hacia la primavera trae una oportunidad para replantearnos nuestros objetivos del comienzo de año. Es un momento lleno de energía que se demuestra en el renacimiento de las plantas, de las flores y la preparación de muchos frutos para comenzar a florecer y crecer.
Así como el durazno que en el invierno tira sus hojas, y renace con el cambio del clima transformando sus flores en frutos y llenándose de hojas huevas. De la misma forma el ser humano tiene esa posibilidad de renacer y traer frutos nuevos, por medio de planes y empezar a trabajarlos para que en un futuro próximo se maduren, y se concreten.
En la medicina tradicional de la India, el Ayurveda, los cambios de estaciones son fundamentales porque indica el cambio de “dosha” y de elemento prevaleciente en el medio ambiente. Para evitar los desequilibrios realizamos esta desintoxicación de nuestro cuerpo por medio de varias acciones, la alimentación, rutinas diarias de limpieza, ejercicios de meditación y físicos, dependiendo de la bioindividualidad.
¿Por qué es necesaria una desintoxicación? Porque muchas veces tenemos una rutina en la cual perdemos conciencia de lo que ingerimos, lo que pensamos o sentimos. Estas rutinas inconscientes nos van creando, lo que el ayurveda llama “ama”, esto es las toxinas que contaminan nuestro cuerpo y pueden generar diferentes tipos de enfermedades, tanto físicas como mentales.
La desintoxicación sirve para dejar nuestro cuerpo lo más puro y limpio, es decir sacar las toxinas acumuladas por el frio, humedad, gripa, exceso de comida o cualquier desequilibrio que haya aparecido en días recientes.
Su principal beneficio es expulsar las toxinas de tu cuerpo lo cual se traduce como una protección ante enfermedades, incrementa tu energía y vitalidad, y fomenta una sensación de bienestar general. Esto lo puedes experimentar en una piel más brillante, una digestión buena sin inflamación y una mejor nutrición en tu cuerpo.
Te invito a vivir esta experiencia y sincronizar tu cuerpo con la naturaleza externa de las estaciones.
Namasté